Un(a) profesional
egresado(a) de la carrera de Educación Diferencial deberá ser capaz de
demostrar competencias como: dar respuesta a las necesidades educativas
especiales de niños y jóvenes realizando evaluaciones que permitan generar
apoyos psicopedagógicos contextualizados, incorporándose a equipos
interdisciplinarios y activando redes en la comunidad, marcando estas acciones
desde una perspectiva humanista cristiana.